Wednesday, August 27, 2008

ARCHIVANDO RECUERDOS

Mi mamá es una de esas personas que guardan TOODO lo que llega a sus manos porque “a lo mejor lo van a necesitar algún día” y yo siguiendo su ejemplo desde que tengo recuerdos me he dedicado a conservar cuanta cartita, recadito, poema, florecita y postal que ha llegado a mis manos. El sábado pasado, estando en la casa de mis papás, me encontré con una caja un poco maltratada por eso de la humedad y esas cosas, forrada con un papel más que cursi y ridículamente bien cerrada. Ahí estaban, todos mis recuerdos olvidados por años en una caja apestosa que dejaba mucho que desear. Como parte de esta nueva etapa de mi vida en la que me quiero sentir una mujer fresca y renovada a cada segundo, decidí poner orden al pasado, así que más rápida que veloz corrí a comprar una carpeta y unos protectores de esos de oficinista para poner orden en el asunto.
No saben, toda una experiencia, jajaja casi lloro de risa cuando entre los papeles encontré un cuento que escribí cuando tenía como 8 años; “la coneja gorda” en el que narraba cómo una coneja que tenía algo así como una adicción por las “halbóndigas” termina salvando al resto de los conejos de el diluvio universal. No sólo eso, había varios recaditos de mis hermanas en los que me pedían perdón por cualquiera que fuera la pelea, poniendo al final de la carta un SI y NO para que yo señalara ahí si las había perdonado o no.
Tardé alrededor de tres horas en terminar de acomodarlo todo en la carpeta, y me sentí tan bien, el recordar esos días de juego, amores de secundaria, chismógrafos y cartas que nunca entregue me hicieron recordar que al final de la vida eso es lo único que te llevas, tus recuerdo, y que la mayoría de las veces, o al menos en mi caso, los recuerdos que se quedan por siempre son lo que terminan con una sonrisa, un suspiro, un abrazo o un beso.

Tuesday, August 26, 2008


All by myself

Jaja, recordando este éxito de los 80´s de Tom Jones comenzamos el mes. Ni hablar, hay cosas que se acaban, personas que se van, ciclos que terminan y no queda más que volver la vista al frente y seguir caminando. Qué difícil, sobre todo cuando el camino que tienes enfrente está más bien nebuloso y no ves con claridad hacia dónde caminas, puedes tener muy claro a dónde quieres llegar, pero en medio de la niebla se complica un poco saber con certeza si tus pasos se encaminan en la correcta dirección. Y así estoy, sola como muppet, a dos meses de perder a mi mejor amiga, confidente, compañera de fiesta, consejera y hermana. A dos meses de tener que enfrentar el momento de llegar a un departamento vacío cuyos únicos muebles serán los de mi cuarto, a dos meses de enfrentarme a esa soledad de la que he huido mucho tiempo. Hace un mes pensar en ese momento no me daba nada de miedo, CLAAARO yo tenía a mi súper hombre maravilla que me iba a rescatar de las garras de la soledad, y no es casualidad que el hombre maravilla ya no está, o al menos no conmigo jajaja, y la cuenta regresiva sigue corriendo.
Se trata de aprender, me imagino que muchas cosas positivas saldrán de esta nueva etapa, pero ese asunto del cambio siempre ha sido un tema delicado para mi, soy una persona controladora, soy "The puppet master" jajajajaja alguien a quién le gusta saber qué va a pasar, cuándo, cómo y por qué. Pero una vez más descubro que soy una estrellita queriendo brillar en medio de un universo infinito, que no tengo el control de nada más que de mi misma y de cómo voy a enfrentar las cosas y qué cara pondré a la vida, lo demás difícilmente depende de mí.
Ni hablar, habrá que llenar los espacios vacios del depa con música, olor a café y algún buen libro.